miércoles, 16 de diciembre de 2009

Uno de Sabines...

El llanto fracasado/Jaime Sabines.

Roto, casi ciego, rabioso, aniquilado,
hueco como un tambor al que golpea la vida,
sin nadie pero solo,
respondiendo las mismas palabras para las mismas
cosas siempre,
muriendo absurdamente, llorando como niña, asqueado.
He aquí éste que queda, el que me queda todavía.
Háblenle de esperanza.
Díganle lo que saben ustedes, lo que ignoran,
una palabra de alegría, otra de amor, que sueñe.

Todos los animales sobre la tierra duermen.
Sólo el hombre no duerme.
¿Han visto ustedes un gesto de ternura en el rostro de
un loco dormido?
¿Han visto un perro soñando con gaviotas?
¿Qué han visto?

Nadie sino el hombre pudo inventar el suicidio.
Las piedras mueren de muerte natural.
El agua no muere.
Sólo el hombre pudo inventar para el día la noche,
el hambre para el pan,
las rosas para la poesía.

Mortalmente triste sólo he visto a un gato, un día,
agonizando.
Yo no tengo la culpa de mis manos: es ella.
Pero no fue escrito:
Te faltará una mujer para cada día de amor.

Andarás, te dijeron, de un sitio a otro de la muerte
buscándote.
La vida no es fácil.
Es más fácil llorar, arrepentirse.

En Dios descansa el hombre.
Pero mi corazón no descansa,
no descansa mi muerte,
el día y la noche no descansan.

Diariamente se levantan los montes, el cielo se ilumina
el mar sube hacia el mar
los árboles llegan hasta los pájaros.
Sólo yo no me alumbro, no me levanto.

Háblenle de tragedias a un pescado.
A mí no me hagan caso.
Yo me río de ustedes que piensan que soy triste
como si la soledad o mi zapato
me apretaran el alma.

La yugular es la vena de la mujer.
Allí recibe al hombre.
Las mujeres se abren bajo el peso del hombre
como el mar bajo un muerto,
lo sepultan, lo envuelven,
lo incrustan en ovarios interminables,
lo hacen hijos e hijos...
Ellas quedan de pie,
paren de pie, esperando.

No me digan ustedes en dónde están mis ojos,
pregunten hacia dónde va mi corazón.

Les dejaré una cosa el día último,
la cosa más inútil y más amada de mí mismo,
la que soy yo y se mueve, inmóvil para entonces,
rota definitivamente.
Pero les dejaré también una palabra,
la que no he dicho aquí, inútil, amada.
Ahora vuelve el sol a dejarnos.

La tarde se cansa, descansa sobre el suelo, envejece.
Trenes distantes, voces, hasta campanas suenan.
Nada ha pasado.

lunes, 14 de diciembre de 2009

1.1

Tengo una obsesión.

Hubo un tiempo en el que creí que se había calmado, pero más bien fue un período de investigar, escrutar, descubrir, acosar, aprender, enamorarme. Sólo se estaba preparando para regresar con más fuerza.

El tiempo, ese que no existe, siempre pasa mejor cuando me acompañan: una sensación de completo bienestar, de plenitud y de emoción me rodea, la sonrisa se me resbala. Quizás no hay sitio malo si es que nos podemos reunir y concentrarnos para experimentar esas miles de impresiones por segundo.

Incluso he llegado a pensar que toda esa energía, que es calor (principal material del que suele componerse  la  magia) de alguna manera sí hace el viaje hasta donde yo estoy. 

Y es que así lo siento, un amor incondicional, un sentimiento de gratitud único. La libertad absoluta de nuestro hermoso compromiso tácito.

Si ustedes estuvieran para entender y yo para explicar, tal vez nos daríamos cuenta de que compartimos todo esto.

 

cafe tacuba11

lunes, 7 de diciembre de 2009

…Solamente muero los domingos y los lunes ya me siento bien*.

Denisse se encontró con la mañana como a las 11:00 y antes de cualquier cosa, siquiera despertar, leyó La casa inundada de Felisberto Hernández; No le gustó mucho. (Maldito duende-Héroes del Silencio)

Ahora sí, fue al baño. Bajó por Extra frutos rojos (“Alguien” se acabó todos los chocolatitos del Extra pasión y ahora sólo quedan hojuelas, ¡Ni crean que ella se lo va a acabar!) y comenzó con Don Quijote; Lo encontró sumamente divertido. Se sintió triste de no tener a nadie a la mano con quién compartir las aventuras. Pensó en aquel tiempo en el que la lectura era colectiva y para leer, se tenía que escuchar. Recordó que quizás extraña esa lectura colectiva de la que no fue partícipe nunca. (Encantamiento inútil-Café Tacvba)

Después pensó en que el martes es su último examen y ensayo de Medieval. Sabe bien que mañana tiene que ir a la biblioteca. Luego, creyó que las últimas cosas las tomamos con desidia, como si ya no fueran importantes. Como si quisiéramos vivir brincando tiempos. Tal cual si pudiéramos darnos el lujo de desaprovechar momentos. Y que luego, definitivamente nos arrepentimos. (Debajo de tu piel-Caifanes) (“Encima de mi piel hay una alfombra…”)

Se encontró con el Canal 11. Un tipo que fue del servicio secreto inglés “da clases de supervivencia”, -Qué útil debe sernos a todos en ésta selva de concreto aprender a comer serpientes crudas (útil no, entretenido sí), pensó (con todo y el paréntesis). Siguió el Politécnico Nacional con su programación (¿Porqué habría de parar?) El traje (2003), película que le parece rusa, porque no encuentra mucha información. Al menos sabe con certeza que hablan ruso y que el director Khudojnazarov lo es. Le gustó lo suficiente. La fotografía y locaciones le parecieron literalmente increíbles, y sobre todo la posibilidad de acercamiento a un todo tan distinto. La historia se desarrolla en un pueblito cerca del Mar Negro y cuenta las aventuras de tres amigos nada pudientes. (El Tlatoani del barrio-Café Tacvba)

El Traje

Ahora va a proseguir con El Quijote. Deberá pasar la barrera de las 100 páginas hoy para sentirse motivada. (Tomando en cuenta sobre todo, que lo debe terminar ésta semana) (La pena o la nada-Nacho Vegas)

*Confesiones de Invierno-Sui Generis.

domingo, 6 de diciembre de 2009

Tlön, Uqbar, Orbis Tertius

[…]Entonces Bioy Casares recordó que uno de los heresiarcas de Uqbar había declarado que los espejos y la cópula son abominables, porque multiplican el número de los hombres[…]

Fragmento Tlön, Uqbar, Orbis Tertius, Jorge Luis Borges.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Para los muy enojados. Recetas para sacar el enojo.

1. Escuchar y cantar (gritar) Bravo de Bunbury y Vegas mientras se hace algún tipo de acondicionamiento físico.

(Se aceptan sugerencias)